Y en el fondo, nada consigue cabrearme. Estoy feliz. Lo que decía: que raro. La verdad es que pocas cosas tienen la importancia que le llegamos a dar. Me encanta esta nueva yo, creo que me podría enamorar de ella. Creo que por fin estoy aprendiendo algo de la vida.
Sólo puedo definir este blog como... rayadas de una loca. Y si, se dice rayadas cuando le das vueltas a algo, rallar en cambio, es para rallar quesico o tomate.
miércoles, 27 de noviembre de 2013
Walking disaster
Tengo tantas cosas que decir y a la misma vez no me sale ninguna. Que raro. Yo que no puedo callarme ni debajo del agua, me quedé sin palabras. Sólo cabreada, estresada y enfadada, no sé si conmigo o con él. Quizás sea con el mundo entero. Con lo fácil que es morir y lo difícil que es vivir. Estoy un poco cansada.
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